Los hoteles, campings y apartamentos turísticos mantendrán de momento el importe de la tasa turística que cobran a sus clientes por noche de estancia. Eso es lo que afirma el Govern de la Generalitat, a pesar de que el Parlament aprobó el miércoles el decreto que establecía la subida del impuesto con efectos desde el 1 de mayo. Fue una aprobación totalmente inesperada y desde el sector turístico han alzado la voz por el «desconcierto e inseguridad jurídica» que provoca esta medida entre el empresariado.
El ejecutivo de Illa anunció hace unos días que posponía la subida de la tasa hasta octubre. Sin embargo, el decreto para aprobar la moratoria se encontró con el voto en contra de Junts y Comuns, lo que provocó que la subida se hiciera efectiva con efecto inmediato contra todo pronóstico. Aun así, la consellera de Economía y Finanzas, Alícia Romero, anunció que el Consell de Govern aprobará otra moratoria el próximo martes para frenar esta medida que rechaza el sector hostelero.
Las dos patronales de las empresas de alojamiento de la Costa Daurada confían en que la subida no se hará efectiva hasta octubre y que este período servirá para abrir una negociación con el sector. Reclaman que se introduzcan diferentes importes de esta tasa en función de la temporada y el territorio donde se aplica y rechazan el recargo municipal que se contemplaba en la propuesta inicial.
«Esperamos que pueda establecerse un diálogo con el sector que hasta ahora no ha habido», apunta Berta Cabré, presidenta de la Federació Empresarial d’Hostaleria i Turisme de Tarragona (FEHT). Así, pide «encaminar esta modificación de la tasa para que respete el proceso de desestacionalización que llevamos años trabajando y que se ponía en peligro con la propuesta actual, así como las diferencias territoriales, ya que la realidad turística de Catalunya es muy diversa».
Por otro lado, Cabré lamenta «el follón que se ha montado en el Parlament estos días. Es una situación que provoca desinformación y agobio en el empresariado turístico de Catalunya y que dificulta saber qué norma tienes que aplicar y qué hay que tramitar». Tras el enredo parlamentario, indica que «los procesos legislativos tendrían que ser más simples y claros para dar confianza».
Mientras, Francesc Pintado, de la Federació d’Associacions d’Empreses d’Hostaleria de la Província de Tarragona (AEHT), se muestra tranquilo a pesar del lío de votaciones de decretos. «Comienza un nuevo contexto negociador y un nuevo período para hablar. Tenemos mucho que decir», celebra.
En este sentido, se siente satisfecho porque «los términos no estaban claros y se han tenido en cuenta nuestros argumentos». Asimismo, dice estar esperanzado en que se hará una tasa diferenciada en función de la temporada y de la zona territorial: «Sabemos que habrá una subida, pero pedimos que se haga de una forma más justa y clara».