La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha salido de la sala donde se celebra este viernes la Conferencia de Presidentes al iniciar su intervención en euskera el lehendakari, Imanol Pradales, y ha regresado después de que acabara de hablar el presidente catalán, Salvador Illa.
Lo ocurrido ha sido considerado como una falta de respeto que visualiza un PP dividido por el radicalismo de Ayuso, según han dicho fuentes del Gobierno, que antes del inicio del encuentro había indicado, por boca del ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, que no creía que se fuera a producir ese hecho y que sería un “error”.
Mientras, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha señalado que Ayuso ya dijo lo que iba a hacer “y cada uno lo expresa de la manera que considera oportuno; lo que está claro es que hay una lengua que compartimos todos, una lengua en la que podemos entendernos todos”.
Según han informado fuentes de su gabinete, Ayuso ha cumplido así su advertencia del jueves, cuando dijo, en una intervención en la Asamblea de Madrid, que no iba a usar “pinganillos” para la traducción simultánea en la reunión de hoy y declaró: “Todo lo que me tengan que decir, en el mismo idioma, en español”.
“En lugar de defender el español en todos los rincones, lo que hacen es utilizar el catalán, la lengua de los catalanes para hacer provincianismo con el secesionismo catalán, que es una corruptela que no pienso pagar”, añadió Ayuso, que en todo caso se ha ausentado de la reunión cuando el lehendakari ha hecho uso del euskera.
Las fuentes han asegurado que la presidenta volvería a entrar cuando continuasen las intervenciones en español, y efectivamente ha seguido fuera del encuentro también durante el turno del president Salvador Illa, que según fuentes de la Generalitat, ha hecho toda su intervención en catalán.
Ayuso ha regresado finalmente a la sala cuando ha empezado a hablar el presidente gallego, su compañero de partido Alfonso Rueda, que ha optado por tomar la palabra en castellano.
Rueda ha empezado su discurso diciendo, en gallego, que Galicia tiene una lengua propia y que sus conciudadanos están “muy orgullosos” de ella, aunque para que se le entendiera sin intermediarios iba a pronunciar el resto de discurso en la lengua que los presidentes tienen en común, que es el castellano.
“Juega al trumpismo”
Las reacciones a esta actuación de la presidenta madrileña no se han hecho esperar. El ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, lo ha calificado de “deplorable” y “lamentable” y ha opinado que Ayuso “juega al trumpismo” y a “emerger” como la “auténtica líder” de la derecha ante un líder del PP “muy flojo”.
El Gobierno Vasco ha afirmado que la ausencia de Ayuso durante la intervención de Pradales ha sido una “intolerable falta de respeto mostrada hacia el euskera, los miles de euskaldunes, el lehendakari y el pueblo vasco”.
A su vez, el presidente catalán ha aprovechado su intervención, íntegramente en catalán, para pedir abordar el debate de la financiación autonómica con “rigor, responsabilidad y solidaridad” y trabajar “alejados de la crítica fácil y la tentación del boicot permanente”.
Desde Palma, Antoni Costa, portavoz del Govern balear de la popular Marga Prohens, ha contrapuesto el talante de Díaz Ayuso, con el de la jefa del Ejecutivo de las islas, quien “no tiende a buscar confrontaciones”.
También, el secretario general de JxCat, Jordi Turull, ha denunciado la actitud de Ayuso como “colonizadora” y la portavoz de JxCat en el Congreso, Miriam Nogueras, ha afirmado que lo que debería haber hecho Illa es decirle a su la presidenta madrileña “que se calle, que no está en condiciones de dar lecciones de nada a los catalanes”.
Por su parte, el secretario de Organización de Unidas Podemos, Pablo Fernández, ha llamado “paleta” e “ignorante” a la presidenta de la Comunidad de Madrid y ha añadido: “Siempre hay alguien que tiene que dar la nota”.
